domingo, 2 de octubre de 2016

ARBORESCENCIAS


Deseando a AM

Te aferras golosa al tronco vertical, tus brazos desnudos abrazan el cilindro duro, elevado, erguido, grueso, tus manos obscenas lo rodean, lo acarician, lo frotan, confirman su consistencia endurecida, aprecian su diámetro. Tu piel morena brilla con eróticos fulgores, tu cuerpo asume la misma curvatura con tu rostro, tus pechos ampulosos, tu estomago y tu vientre, con tu pubis. Tus piernas ya un tanto entreabiertas se imaginan a horcajadas cabalgándolo, tu magnolia humedecida se imagina pene/trada, llena, colmada, saciada de ese grosor imposible, tu negro pelo se derrama paralelo intentando fluir hacia ese falo imponente. Excitado sigo con los ojos ávidos las curvas que dibujan tu espalda, desde tus hombros color miel bajando por esa suave concavidad hasta la comba inquietante de tus nalgas, por tus muslos carnudos y sabrosos, por tus pantorrillas en piel viva, por tus tobillos y por tus pies. En un ejercicio de insoportable voracidad te voy lamiendo por todos los fragmentos de tu tersa y dorada piel expuesta, saboreo así tus profundos sudores, y tu saliva en un beso que te come la boca, te huelo entera poro a poro y por el surco de cada pliegue, te desnudo con mis labios voraces para liberar tus senos y sus oscuros pezones, para hundir mi nariz en la tibia copa de tu ombligo, para abrir tus lascivos deseos de hembra ansiosa, para liberar las mariposas que aletean en tus entrañas, para ver florecer la mojada rosada rosa de tu sexo, para que mi urgente virilidad se yerga endurecida y sea el tronco vertical al que te aferras golosa.


No hay comentarios: