Te aviso en este atardecer lejano
que hacia la noche visitaré tu lecho tibio para saciarme de tus besos, de tus
fluidos, de tu piel, de tu olor de hembra abierta como una flor cuajada en su
perfume. Casandra, soñada y amada, iré entonces desde mi noche hacia tu noche,
hacia ti Reina de mis Deseos Ocultos, y en esta noche nuestra estaré a tu lado
como en un sueño, espérame con todos tus instintos a flor de piel, con todos
tus anhelos carnales abiertos como una corola de rosados pétalos ardientes, con
tus pezones de hembra plena erguidos y ansiosos de mis labios, con tu pubis
latiendo y esperando mi nariz curiosa, mis dedos eróticos, mi lengua punzante,
mi ídolo endurecido que te penetrará hasta tus más íntimos rincones de mujer
enceguecida por los deseos de entrega, de rendición de húmeda hembra
hambrienta. Espérame toda desnuda, solo cubierta con la sabana, para que al
llegar vea el dibujo de tu cuerpo bajo esa tenue tela, vea tus colinas y valles
sexuales, tus pechos sobresaliendo como cumbres por vencer, tu vientre como un
dulce territorio a recorrer con las caricias de mis manos, tu pubis como una
pequeña selva olorosa donde mis labios buscaran y beberán los líquidos del sexo
como una lobo sediento y en celo en plena luna llena. Iré hacia ti, hacia tu
lecho tibio, hacia tu cuerpo desnudo, hacia tus ansias de amor-dolor-placer,
hacia esos pechos que esperan mis labios para entregarse rendidos ofreciendo
sus pezones sensibles, hacia tu boca que se deshace en dulce saliva esperando
mi boca, hacia ese capullo que escondes entre tus piernas suaves, hacia ese
nido mullido de tu sexo, porque entre tus vellos perfumados de ti pacerá este
potro solitario que cabalga desesperado buscando tu calor hasta la lejana isla
de tu alma. Y estaré toda la noche a tu lado y serás mía como nunca has sido de
nadie, y después del goce, mientras acaricio tu hermoso y largo pelo, me
hablaras de tus sueños, de tus esperanzas, de tus temores, de tu amor, de tus
deseos, y yo me hundiré en la profundidad de tus ojos ebrio de ti. Y borraré de
tu alma el mundo agresivo, frío, ajeno, donde eres una niña solitaria,
asustada, sin entender que sentido tiene esta vida de ausencias, de desamparos,
se abrirá mi corazón para cobijarte, para darte mi ternura varonil, para que
sientas en tus mejillas mi pecho, y apoyes tu rostro en mi, y te escondas en
mi, que sientas que en mi hay alguien que te ama y necesita, así tal como eres,
deseo que me sientas tan tuyo como nadie, que sepas que posees mi amor con toda
la intensidad de un viejo macho que sabe de soledades tanto como tú, eso deseo,
eso quiero regalarte esta noche que iré hacia ti. Espérame con un beso de amor
más allá de lo físico, de alma a alma, un beso que te haga ser para siempre
dueña de mis locos vuelos extraviados y de mis locos deseos contenidos.
sábado, 9 de febrero de 2013
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario