Yo no espero, yo acecho, asedio,
acoso, desde mis sombras y mis silencios, mimetizado en juegos y fuegos,
rastrero y cobarde no enfrento, me oculto en una trampa de sin palabras, desde
lejos, tímido, ajeno, ausente casi, yo miro por los intersticios y las grietas
que dejan tus suspiros o tus susurros. Yo navego en tus sueños, agazapado entre
tus sabanas, hirviendo de ti pero en un callando y sin tocarte. Yo no espero
más de ti que lo que tú quieras darme como si te lo robara, lo que sea tu
voluntad embaucada por mi secreta voluntad de macho envuelto en mis deseos de ti.
Yo no espero tu cuerpo, tu boca, tus manos o tus ojos o tu pecho desnudo con
que reinas mis ansias, no!, yo solo confío en que lo que ha de ser será.
lunes, 11 de febrero de 2013
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario