Será un ramo de rosas rojas que llevarán mis
besos a rozar tus labios en un atardecer de mar y de rojos arreboles, y
nuestras manos buscarán el tierno calor del Amar en su contacto tranquilo y
romántico, mientras las olas irán borrando las huellas de nuestros pasos para
que nadie testifique que tocamos las puertas del Paraíso, para que nada
interfiera en la sensación de ser uno y todo en cada beso de rosa roja que
deposite sobre tu roja boca. Y beberemos champaña burbujeante insertos en la
alegría de sabernos dueños del Universo donde solo tú y yo habitamos en medios
de los cielos estrellados, de las constelaciones que van dibujando nuestros
rostros en el raso azul oscuro del tiempo y del espacio, únicos en el infinito
beso del Amar que se extenderá hasta donde ya no hay horizonte, más allá de los
árboles y las nubes, más allá de las palabras y de los silencios. Comeremos bombones
de miel y chocolate entre las dulzuras de la pasión desatada en el lecho, entre
las caricias que tocan, soban, aprietan, hurgan en los rincones de nuestros
cuerpos desnudos, allí declararán manos dedos labios lengua la íntima necesidad
de volcarnos en la búsqueda de los goces nos debemos contraviniendo la
imposible distancia y los temporales desencuentros. Sobre la verde grama de los
primaverales pastizales oleré tu sexo con mi verga erecta buscando el aroma de
tu celo, lameré tus anca de potranca ansiosa presta a la penetración de su
potro endurecido, y seremos semental culiando cubriendo montando su yegua
húmeda y abierta a la recepción penetrante, y hundiré mi miembro en tu vulva
hasta punzar rozar tus secretos instintos de hembra hambrienta del lechoso y
denso jugo de su macho.
lunes, 7 de julio de 2014
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario